NUEVAS NORMATIVAS APLICABLES A LA FORMULACIÓN DE COSMÉTICOS



Dentro del marco de la Unión Europea, el Scientific Committee on Consumer Safety (SCCS), con el fin de preservar la seguridad de los consumidores, sobre todo la de los niños, tras una nueva valoración de los conservantes, acota una vez más las concentraciones máximas de algunos de ellos. 

A pesar de que los conservantes son necesarios para garantizar productos libres de microorganismos de tipos virus, bacterias u hongos, no todos han resultado ser inocuos para la salud humana. 

La mezcla de Methylchloroisothiazolinone y de Methylisothiazolinone (MCI / MI) en productos como cremas corporales ha sido prohibida, ya que se han manifestado casos de alergia en la piel. 

Esta medida entrará en vigor para los productos que salgan al mercado a partir del 16 de julio de 2015.

La prohibición no afectará a los productos que como los geles de ducha y los champús se tienen que enjuagar, no permaneciendo en la piel después, y  siempre que se cumpla que  tales producto tengan una concentración máxima de 0.0015% en una mezcla de 3: 1 de MCI / MI.

Así mismo, desde el pasado 16 de abril de 2015, la Comisión ha limitado la concentración máxima de otros dos conservantes muy utilizados: Propilparaben y Butylparaben, en los productos aplicables en niños menores de tres años.

Como consecuencia, la norma pasa de permitir una concentración del 0,4%, cuando se emplean en forma individual y del 0,8%, cuando se mezclan con otros ésteres, a una reducción que se fija finalmente en el 0,14% permitido cuando se utilizan tanto individualmente como en conjunto.

Estas resoluciones están en la linea de las medidas que la SCCS viene tomando en la preservación de la seguridad pública.

Recordemos que, según el Reglamento (UE) 358/2014, se fijó que desde el 30 de Octubre de  2014 está prohibido el uso de Isopropilparabeno, Isobutilparabeno, Fenilparabeno, Bencilparabeno y Pentilparabeno, por falta de datos que permitieran una evaluación confiable sobre los efectos sobre la salud.

Aunque se han encontrado incidencias por el uso de parabenes consistentes en enrojecimiento de la piel, picor y dermatitis, las acusaciones en cuanto a que pueden producir trastornos endocrinos y cáncer de mama o próstata no se ha podido demostrar, concluyentemente, que se deba a la utilización de productos como los desodorantes, etc. 

En vista de lo cual, la prevención está siendo la medida adoptada.

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