Qué es la certificación Ecocert

Debido a la dificultad que el consumidor tenía para reconocer los productos fabricados bajo procedimientos respetuosos con el medio ambiente y con una cantidad de sustancias de origen natural y ecológico significativa; y ante la ausencia de normativas oficiales al respecto, nació la certificación Ecocert.

Una de las máximas que promueve esta pauta es la integración y el desarrollo del concepto de "química verde".

Los ingredientes con un origen no Petroquímico permiten preservar los recursos del planeta y  minimizan los gases de efecto invernadero; puesto que la huella de carbono de los ingredientes de origen vegetal es generalmente más débil.

La concesión de los sellos del estándar Ecocert impone una serie de requisitos a cumplir:

1- La promoción del uso de ingredientes que procedan de agricultura ecológica:

Se establecieron dos modalidades de etiqueta de sello Ecocert:

a) Como Cosmético Ecológico:

Cuando el porcentaje en ingredientes vegetales de la formulación  debe ser, en un mínimo del 95%, procedente de la agricultura ecológica.

Y cuando, de todos los ingredientes, en un mínimo de un 10% estos deben proceder de la agricultura ecológica.

b) Como Cosmético Natural:

Cuando el porcentaje mínimo de los ingredientes vegetales es del 50% procedentes de la agricultura ecológica.

Y cuando, de todos los ingredientes de la fórmula, el 5% mínimo, procede de la agricultura ecológica.

2- La utilización de procesos de producción y transformación que sean respetuosos con el medio ambiente y la salud humana:

-En este sentido, se estableció que  los ingredientes han de proceder de recursos renovables.

-Además, se comprueba la ausencia de parabenos, Ácido Etileno Diamino Tetracético ( EDTA), fenoxietanol, productos a base de cloro o derivados clorados, productos a base de amoniaco, silicona, PEG, productos a base de fosfatos y de fosfonatos, tensoactivos, transgénicos, productos a base de micro-organismos genéticamente modificados, nanopartículas ( en escala de 1 a 100 nm),  filtros solares químicos, colorantes y perfumes sintéticos e ingredientes de origen animal, a excepción de aquellos que son naturales en sí mismos como la miel o la leche.

-También se controla que se utilicen embalajes reciclables y que todo sea de naturaleza biodegradable.

3- Por otro lado, todos los operadores son controlados sobre el terreno por Ecocert:

Se trata de verificar que durante todo el  proceso de producción  se asegure la transparencia y la garantía de cumplimiento de los preceptos establecidos.

La calidad de los ingredientes del producto acabado debe asegurar la ausencia de:

-Contaminantes en todos los ingredientes y sus derivados.

-Radiaciones ionizantes ( alpha, beta, gamma,etc) en el producto acabado o sus ingredientes.

-Nitrosaminas: ni sus ingredientes ni los productos acabados deben generar la formación de nitrosaminas.

-Tecnología genética prohibida: ningún ingrediente puede ser GMO o provenir de un procedimiento en que los reactivos sean organismos genéticamente modificados.

-Las pruebas hechas en los animales de productos acabados: sujeto a la legislación europea.

-Ciertos gases propulsores prohibidos: en atomizadores o brumisadores que utilizan un gas como propano, n-butano, isobutano u óxido de dimetil ( dimetileter), al representar un peligro potencial. En su lugar, se autoriza el aire comprimido, el N2.

Así mismo, ser avalado por Ecocert, es un reconocimiento a la sabiduría de algunos fabricantes de cosmética que valoran la calidad de las sustancias de origen natural y se preocupan por la salud humana y del medio ambiente y que de otra forma, para el consumidor sería bastante imposible distinguir.

Cada vez más fabricantes de cosméticos, que comparten esta filosofía, se suman a estos criterios que representa el certificado Ecocert y exhiben este sello en sus envases; por lo que a los consumidores nos facilitan identificar claramente productos con auténticas características ecológicas. 

Existen otro tipo de sellos según los países, que avalan la autenticidad y calidad de los cosméticos naturales.

Conocerlos es una ventaja, ya que supone que no nos veamos obligados a tener que aprender ni entender de formulaciones ni de conservantes autorizados o no, como para volvernos locos mirando etiquetas.

Esto nos da una garantía y tranquilidad, haciéndonos muy sencillo nuestro proceso de selección.